A sus 27 años y con una carrera consagrada en el alto rendimiento, la taekwondista Sabrina Mai se prepara para disputar el Campeonato Mundial de Taekwondo ITF, que se celebrará del 23 al 27 de julio en España, y será su última competencia. Así lo confirmó la propia atleta en una charla íntima, donde repasó su camino en el deporte y compartió las emociones que atraviesa en este momento clave.
“Después del Mundial anuncio mi retiro”, confesó con serenidad. “Siento una mezcla de emociones; es la culminación de una carrera bastante extensa”, agregó en Depor TV, con la madurez de quien sabe que dio todo en cada combate.
Mai comenzó a practicar taekwondo a los 9 años y desde los 12 está vinculada al alto rendimiento. “Fueron 15 años de dedicación total. Muchos años de competencia, viajes, de postergar reuniones familiares, salidas, momentos personales. Llega un punto donde uno se cansa de esa rutina”, reconoció.
Aunque asegura que se siente en un gran momento deportivo, tanto física como emocionalmente, la decisión de retirarse llegó de forma natural: “No lo sufrí. Me dio paz y satisfacción haberla tomado”.
Lo cierto es que su presencia en este Mundial estuvo en duda hasta último momento. “A principios de año tuve una crisis. Dije: ‘basta, ya está, me harté, dejo’. Me bajé del segundo selectivo y se lo comuniqué a Néstor Galarraga, organizador del Mundial. Pero fue él quien me convenció de seguir al menos hasta esta última cita internacional”, contó.
El taekwondo, para Sabrina, es mucho más que un deporte. “Siempre lo describí como un refugio. Un espacio incómodo que obliga al movimiento permanente. Esa incomodidad me enseñó a transformar los obstáculos en desafíos, no solo en la competencia, sino también en la vida”, reflexionó.