Guillermo Vilas nació en provincia de Buenos Aires el 17 de agosto de 1952. Sus padres fueron José Roque Vilas y Maruxa de Vilas. Creció en Mar del Plata y su padre se encargó de incursionarlo en el mundo del tenis a los cinco años. A los once años su entrenador Felipe Locicero uno de los pioneros de esta historia, logró que Guillermo ganara su primera medalla en el torneo interno del Club Náutico de Mar del Plata en 1963, club en donde comenzaría a formarse como tenista. Al entrar en la adolecencia siguió cosechando títulos: Campeón Argentino y Sudamericano en singles y dobles.
Esos logros lo llevaron a entrenarse a Buenos Aires Lawn Tenis y era participante de los Torneos Interclubes (1967).
Participó del torneo Orange Bowl de Miami y fue campeón en dobles, y en el año 1968 volvió a consagrarse, pero esta vez de manera individual al derrotar al Mexicano Emilio Montano. Repitió el titulo al año siguiente al derrotar en la final a Dick Stockton.
A la edad de 18 años fue considerado el mejor jugador del tenis Argentino. En el año 1970 debutó en la Copa Davis. Producto de ello dejó sus estudios de abogacía para dedicarse de lleno al tenis. Su primer torneo ganado como profesional se dio de una forma poco habitual (1973 – Buenos Aires) donde derrotó a Björn Borg, por abandono del sueco tras una caída. Vaya paradoja que este sería uno de los rivales más duros durante toda su carrera. Con el paso del tiempo y fuera de las canchas, se hicieron grandes amigos y, hasta la actualidad, conservan su amistad.
En 1974 Vilas marcaría una proyección de lo que se venia a futuro. Si bien comenzó con una derrota en Roma frente al ya mencionado Björn Borg, las victorias de ese año vendrian con los abiertos de Gstaad, Hilversum, Louisville, Toronto, Teherán y Buenos Aires. Al ganar estos torneos le dio la chance de participar en el campeonato másters de Australia, que reunía a la mejores tenistas del mundo. No sólo participó sino que se consagró en la final al vencer al rumano Ilie Năstasev, por 7-6, 6-2, 3-6 y 6-4, quien fue ganador de las últimas tres ediciones.
En 1975 Vilas llegó a la primera final de un Grand Slam, el Roland Garros, donde fue derrotado por el sueco Björn Borg por 2-6, 3-6, 4-6. De ocho finales alcanzadas ese año, Vilas ganó cinco y perdió tres. Ese mismo año se consolidó como uno de los mejores jugadores del tenis mundial al ganar la temporada del torneo, hecho que lo posicionó top 2 en rankig de ATP.
El único torneo de Grand Slam que no pudo ganar fue el tradicional y legendario Wimbledon, donde sus participaciones más destacadas se produjeron en 1975 y 1976, cuando en ambas ocasiones accedió a los cuartos de final.
En 1977 fue su mejor año en cuanto a cosecha de títulos y partido ganados de forma consecutiva en una sola temporada, entre otras estadísticas y récord obtenidos ese año, si bien comenzó con una derrota en enero pierdiendo su segunda final de Grand Slam ante Roscoe Tanner, luego el 5 de Agosto enderezaría el rumbo de un Gran Slam, en Roland Garros al arrasar en la final con a Brian Gottfried por 6-0, 6-3 y 6-0.
Disputó 31 torneos de los cuales ganó 16 (récord absoluto en la era abierta) con 130 victorias y sólo 14 derrotas, logrando el 90,3% de efectividad. También estableció el récord de mayor cantidad de victorias consecutivas con 46 (50 si se tiene en cuenta el torneo de Rye), cayendo en la final de Aix En-Provence ante Illie Năstase. Desde julio hasta septiembre del mismo año, se mantuvo invicto en 53 partidos, ganó siete títulos consecutivos -Kitzbuhel, Washington, Luisville, South Orange, Columbus, Abierto de los Estados Unidos (Connors en la final) y París.
A pesar del extraordinario año del Argentino, no logró posicionarse como N°1 debido al sistema de Ranking que tenía el ATP. En esos momentos, terminó en el puesto Nº2 por debajo de Jimmy Connors (que ganó el masters y otros seis títulos siendo subcampeón en Wimbledon y el abierto de los EE. UU.)
En 1978 y 1979 se adjudicó el abierto de Australia. En 1981 llegó el turno de la gran Copa Davis. De la mano de Guillermo Vilas y José Luis Clerc, la Argentina jugó su primera final de su historia en esa competencia. La serie se jugó en Cincinnati, ante los Estados Unidos, que contaba con el liderazgo de JohMcEnroe, número uno del mundo, y con Jimmy Connors, Roscoe Tanner, y Peter Fleming.
En primera vuelta Vilas fue derrotado, pero Clerc salvó el punto al conseguir una victoria. Ambos dieron pelea hasta en final, pero perdieron en dobles después de casi seis horas de juego por 6-3, 4-6, 6-4, 4-6 y 11-9. En la tercera jornada de la serie, el sueño argentino terminó cuando Clerc cayó ante Mc Enroe por 7-5, 5-7, 6-3, 3-6 y 6-3, y la participación de Vilas ya no servía como para poder remontar. Después de que ambos terminaran sus carreras profesionales Vilas y “Batata” Clerc se convirtieron en buenos amigos.
En 1982 realiza su última gran temporada a los 30 años de edad, llegando nuevamente a la final de Roland Garrós (derrota ante Mats Wilander) y a las semifinales del US Open (ante Connors). Derrota a Connors en las finales de Rotterdam y Milán, y a Ivan Lendl en las de Montecarlo y Madrid. Obtiene siete torneos, finalizando el año como N°4 del ranking ATP y N°2 del Grand Prix. Ese mismo año se disputó la guerra de Malvinas entre Argetina y Reino Unido y, en señal de protesta y de empatía, Guillermo se negó a participar de Wimbledon de esa temporada.
Se retiró en 1989, y retornó brevemente en 1992, año en que solo jugó el Abierto de Atlanta y algunos torneos Challengers.
En Buenos Aires existe un club llamado “Vilas Club” en su honor. Allí se juega anualmente un torneo challenger válido por el circuito profesional.
El fenómeno Vilas popularizó el tenis y, a partir de su figura, se generó gran entusiasmo en Argentina. Inventó el golpe que se realiza a la pelota entre las piernas de espaldas a la red, al que se denominó “Gran Willy”.
Sin dudas que ha sido uno de los grandes deportistas que ha dado nuestro país y que no debemos olvidar. Guillermo Vilas, un tenista para el recuerdo.