El Coronavirus impactó de manera contundente en el mundo y generó un cambio abrupto no sólo en el estilo de vida cotidiana de las personas, sino también en el deporte.
La pandemia alteró completamente los calendarios de todas las disciplinas que se habían establecido para este año y algunas hasta fueron canceladas de forma definitiva. Un ejemplo de esto es el evento deportivo más importante del año:«Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020» (pospuestos para el siguiente año). La cita tendrá lugar, haya o no vacuna para el Coronavirus, entre julio y agosto del 2021, según confirmaron las autoridades del Comité Olímpico Internacional.
A su vez, se modificaron algunos formatos para la continuación de las competencias, ocasionando, en muchos casos, que los deportistas tengan que amoldarse a nuevas reglas. También se vislumbran problemas económicos para las distintas entidades que, ante esto, no pueden afrontar los gastos correspondientes, lo que genera un crecimiento en su pasivo día tras día.
La práctica deportiva, a pesar de todas las dificultades, no se detuvo por completo, ya que algunas disciplinas retomaron la actividad: los deportistas Olímpicos se entrenan de cara a los próximos Juegos, los equipos de fútbol clasificados practican día a día, con las medidas correspondientes, pensando en la Copa Libertadores que comenzó la semana pasada y el Básquet que comenzará la Liga Nacional el 1 de noviembre.
Nota: Ignacio Lobos (Instituto Superior General San Martín)