Cada 5 de junio, millones de personas en todo el mundo se unen para celebrar el Día Mundial del Ambiente. Desde su instauración en 1973, esta fecha se ha convertido en la mayor plataforma global para la divulgación y concientización ambiental. En 2024, el enfoque se centra en la restauración de tierras, la detención de la desertificación y el fortalecimiento de la resiliencia a la sequía, bajo el lema “Nuestras tierras. Nuestro futuro. Somos la #GeneraciónRestauración”.
El lema de este año, “Nuestras tierras. Nuestro futuro. Somos la #GeneraciónRestauración“, resalta la urgencia de actuar ahora para recuperar los ecosistemas degradados. Aunque no podemos retroceder en el tiempo, sí podemos emprender acciones significativas para hacer crecer los bosques, revitalizar las fuentes de agua y restaurar los suelos. Este compromiso no solo busca mejorar el medio ambiente, sino también asegurar un futuro sostenible para las próximas generaciones.
El deporte, con su capacidad para educar y formar valores, se presenta como un poderoso agente de cambio en la lucha por la sostenibilidad ambiental. Incorporar valores ambientales en la práctica deportiva permite que estos se transmitan de manera natural a las comunidades. Esta conexión entre deporte y medio ambiente resuena fuertemente en el programa PROFEDES (Programa Federal de Deporte Sostenible) de la Confederación Argentina de Deportes (CAD).
PROFEDES se dedica a desarrollar acciones para concientizar y educar sobre el cuidado del ambiente a través del deporte. Entre sus iniciativas, promueve la implementación de protocolos y pautas para la organización de eventos deportivos sostenibles. Estos protocolos incluyen la gestión de residuos basada en la economía circular, la eficiencia energética e hídrica, y la creación de huertas agroecológicas e infraestructuras sostenibles.
Este enfoque integral no solo busca minimizar el impacto ambiental de las actividades deportivas, sino también inspirar a los participantes y a las comunidades a adoptar prácticas más sostenibles en su vida diaria.
Bajo el eslogan “Respira vida, protege la tierra: Conciencia ambiental para un mañana brillante“, se hace un llamado a todos los ciudadanos para que se sumen a esta causa. La restauración de nuestras tierras no es solo una necesidad ambiental, sino un deber moral y una oportunidad para construir un futuro más resiliente y sostenible.